miércoles, 5 de noviembre de 2008

ARTE / egon schiele


Egon Schiele, de cuya muerte se cumplieron este pasado viernes 90 años, convirtió su obra en una de las claves para entender el inconformismo del arte vanguardista. Con sus cuadros, oníricos cantos expresionistas a la sensualidad y a la muerte, el pintor desafió a la burguesía de la Viena de principios del siglo XX, cuestionó el concepto de belleza artística y avanzó el fin de una era. Nacido en el pequeño pueblo de Tulln (Austria) en 1890, Schiele representó junto a Oskar Kokoschka una nueva generación artística en su país, como discípulo y protegido de Gustave Klimt. Egon Schiele apenas conoció el reconocimiento artístico en vida. El éxito le llegó en marzo de 1918, cuando participó en la 49 edición de la Exposición de la Secesión de Viena. Meses después, su esposa Edith moría embarazada, aquejada de gripe española, que en ese momento asolaba toda Europa. Él murió tan solo tres días más tarde, el 31 de octubre de 1918, a causa de la misma enfermedad. Desde aquí nuestro pequeño homenaje, a nuestro juicio uno de los mas grandes e influyentes artistas del los ultimos tiempos.

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